Nueva Poesía Chilena

miércoles, septiembre 21, 2005

Cuento

Cuento las baldosas que hay en mi baño
y las paredes que hay en mi pieza.
Cuento el pasto que hay en mi jardín
y las cajas vacías del trabajo.
Cuento las letras del desencanto
y las páginas de un futuro libro.
Cuento los dedos de mis manos
y los granos de un frasco de café.

Y no he contado los besos que alguna vez te di,
ni los abrazos con los que te estremecí.
No he contado los días solitarios
ni las sonrisas que nacieron para ti.

Cuento los cielos de este mundo
y los discos que poseo.
Cuento los pasos de la reja a la puerta
y las hojas caídas anteayer.
Cuento las medallas obtenidas con esmero
y los goles que hice aquella vez.
Cuento las monedas que del piso recogí
y las puertas abiertas en esta tarde febril.

Y no he contado las miradas tocadas por los dos
ni los susurros que me dijiste en el oído.
No he contado las lagrimas que he tragado
ni los cariños que dejé de recibir.

Cuento los pestañeos contra el viento
y las veces que respiro al dormir.
Cuento las cucharadas de azúcar,
y las veces en que me desvelé.
Cuento los teléfonos que tengo
y la ropa que tiré en mi habitación.
Cuento los viajes que he realizado
y las pruebas que he tenido en este mes.

Y no he contado los poemas que perdí
ni los escalones que juntos dejamos atrás.
No he contado los regalos que me hiciste
ni los sueños que alguna vez imaginé.

Cuento las revistas que he leído
y las mujeres con las que bailé.
Cuento los fracasos alcanzados
y las personas que me ayudaron.
Cuento los días que se escapan
y las lluvias que me inundan.
Cuento los finales impensados
y las historias sin final.

Y no he contado los sollozos de la abeja a la flor
ni los minutos que tuvimos que esperar.
No he contado las noches frías del verano
ni las despedidas dejadas por ahí.