Confesión

No hablo con la sinceridad temerosa presente en mí
No puedo decirte nada
es la nada en palabras

El blanco está en mi mente
aunque clara de lo que tengo que decir

Urgente necesito un desahogo
y sólo tú puedes escucharlo
Y quizás tú lo intuyes
pero la inocencia presente en ambos obstruye ese sentido...

Mi persona es una timidez infinita en tu presencia
y mi pensamiento existe contigo
El ser y existir están presente en mí:
Yo existo y lo que siento es

¿Y el desahogo?
Trampa circundante con prolijas palabras afiladas en el pesar del temor
Ahora entra la desilusión y la certeza de mi presencia en ti

Mujer inspiradora de todo lo escuchado
eres la causante de esas palabras unidas no por otras palabras,
sino por sentimientos que adhieren todo eso formando una cosa

Mujer princesa de lo divino
que un servidor tuyo intenta apreciar
cuya confesión no es otra que
sinceramente no te deja de amar

Tú seguirás ganando mientras yo sigo buscando
buscando la respuesta al arrepentimiento de un momento inolvidable
un momento crucial de signo inequívoco
no tomado en cuenta por mí
sino por el miedo injustificado que como un espíritu
se apoderó de ese ser enamorado

Un momento sutil de bondad de confianza y realidad
Un momento en que te mostré mi corazón
con otras palabras pero no directamente

Es ese arrepentimiento que creó mi sensación de culpa
desde que te deje ese día

Y siempre he estado aquí
intuyendo y pensando
sacando nada concretamente
únicamente queriendo olvidar que siempre te recuerdo

Esperando pacientemente el día
en que estemos abrazados nuevamente
y que la corta distancia existente
no sea más que otra señal de amor