Incompleto

Mi libro de pensamientos esta en mi cabeza...
y también en mi inusitado corazón.

Confieso lo que no puedo confesar
Confieso que realmente no puedo tolerar
que mi tolerancia se vea arrastrada
con la arena de tu olvido
olvidado tras tus huellas
que marcan los pasos de mi día.

Ese día que comienza con un alba
que nos muestra un cielo rasgado
por la oscuridad de la montaña.

Una montaña de ilusiones pasadas,
desaparecidas en las alturas,
estancadas en nuestras inalcanzables
capacidades.

Un vacío lleno al sentir,
al sentir algo inmensamente fuerte
que hace que el mundo desaparezca por completo,
reduciendo todo lo que veo a un sólo ser.

A un ser que con delicadeza y dulzura
es capaz de arrasar con el corazón de un ser viviente.

Con una fuerte luz que nace de sus ojos,
que me hace ver un más allá,
cada vez más cerca.